El equilibrio no está en los extremos, siempre va por el medio. Este es el oficio, el arte más elevado: estar justo en el medio, sin elegir, sin irse a la izquierda ni a la derecha. No ser de derechas ni de izquierdas, estar justo al medio es la forma de trascender al mundo. Entonces ya no eres ni un hombre ni una mujer. Eso es lo que Jesús dice: Entonces ya ni eres un ser materialista ni un ser espiritual. Entonces ya ni estarás vivo ni estarás muerto. Ni esto ni aquello, el puente será cruzado. Has alcanzado la meta. Y la meta no está en algún lugar en el futuro, menos en el pasado, está aquí entre los dos extremos en el ahora, en el hoy.
Camino del Medio, es mi vivir diario, ese vivir a intensidad entregando el todo sin esperar nada, el dar amor, alegría, paz y esperanza, esta es una muestra de mi navegar por los caminos que me ha tocado transitar sin rutinas ni cargas, siempre rebosante y trascendente y esa trascendencia es el florecimiento. Esa es la madurez que hay que alcanzar; la meta del Todo y Nada.
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